EL ÚLTIMO QUE APAGUE LA LUZ

El mundo oscurece. A partir de esta medianoche y como consecuencia de las medidas de ahorro energético que dictó alguien con pocas luces, el orbe será más sombrío. Pronto dictarán normas algo más drásticas encaminadas al ahorro de energía. Me temo que echar un polvo van a prohibirlo y de ahí a retirar la viagra va un paso. Dirán que es por nuestro bien, para recargarnos de energía y, de paso, librarnos de la viruela del mono, que algún funcionario científico con ganas de prosperar en el escalafón, dice que se contrae por conducto sexual. Mi consejo es que folléis como poses@s, como si no hubiera un mañana... y, oye, el últim@ que salga de la habitación, que apague la luz.

"Matamos a cada paso, no solo en guerras, disturbios y ejecuciones. Matamos cuando cerramos los ojos ante la pobreza, el sufrimiento y la vergüenza. De la misma manera, toda falta de respeto por la vida, todo el coraje, la indiferencia, todo desprecio no es otra cosa que matar"  (Esto lo dijo, escribió y practicó un defensor de la luz, Herman Hesse al que le dieron el premio nobel de literatura en 1946 y no dió tiempo a darle ninguno más porque hoy hace 60 años que se pasó a la habitación de al lado)

Hoy hubiese cumplido 59 años pero a Whitney Houston se le apagó la luz a los 48 porque no encontró a nadie con quién bailar. Eso es lo que pasa cuando ya no eres popular. Bona nit i, a més de realitzar el consell anteriorment donat, buscar la llum en un altre lloc, mirar al cel per exemple, sense tanta contaminació lumínica igual veiem la nostra estrella.