martes, 31 de octubre de 2023

EL SECRETO DE ANGIE

 

Angie era una mujer hermosa y misteriosa que vivía en una mansión a las afueras de Londres. Tenía el pelo rubio, los ojos verdes y una sonrisa cautivadora. Nadie sabía mucho de ella, solo que era rica, soltera y que le gustaba coleccionar antigüedades. A veces, se la veía pasear por el parque con su perro, un gran danés negro llamado Lucifer. Otras veces, se la veía salir de su casa en su lujoso coche, rumbo a algún destino desconocido.

Angie tenía muchos admiradores, pero ninguno lograba conquistar su corazón. Ella los rechazaba con elegancia y frialdad, sin dar ninguna explicación. Solo había un hombre que había conseguido acercarse a ella: Mick Jagger, el famoso cantante de los Rolling Stones. Mick había conocido a Angie en una fiesta y se había quedado prendado de su belleza y su misterio. Le había dedicado una canción, llamada Angie, en la que le pedía que no le abandonara y que le contara su secreto.

Angie y Mick habían mantenido una relación clandestina durante varios meses, pero Angie nunca le había dejado entrar en su casa ni le había revelado nada de su pasado. Mick estaba cada vez más frustrado y obsesionado con ella, y quería saber la verdad. Un día, decidió seguirla cuando salió de su casa en su coche. La vio conducir hasta un cementerio y aparcar cerca de una tumba. Mick se bajó de su coche y se acercó sigilosamente para ver qué hacía Angie.

Angie se arrodilló frente a la tumba y depositó un ramo de rosas rojas. Luego, se quedó mirando la lápida con una expresión de dolor y amor. Mick se asomó para leer lo que ponía en la lápida y se quedó helado. Decía:

“Aquí yace Richard Jones 1942-1969 Amado esposo de Angela Jones Que en paz descanse”

Mick no podía creer lo que veía. Angie era la viuda de Brian Jones, el fundador y ex guitarrista de los Rolling Stones, que había muerto ahogado en su piscina cuatro años antes. Recordó que Brian había sido su amigo y compañero de banda, pero también su rival y enemigo. Había sido expulsado del grupo por sus problemas con las drogas y el alcohol. Él había ocupado su lugar como líder. Brian había tenido muchas novias, pero ninguna tan bella como Angie.

Mick sintió un escalofrío al pensar que Angie había sido la esposa secreta de Brian, y que él había estado engañándola con ella sin saberlo. Se preguntó si Angie lo sabía todo, si lo había hecho por venganza o por amor, si le había mentido o si le había perdonado y si Angie aún amaba a Brian o si lo amaba a él.

Angie se levantó de la tumba y se dio la vuelta. Entonces vio a Mick, que la miraba con una mezcla de sorpresa, culpa y miedo. Sus miradas se cruzaron y ninguno dijo nada. Solo se oyó el ladrido de Lucifer, que rompió el silencio.

«Somos el producto de lo que los otros han irradiado de sí o perdido, pero creemos que somos nosotros. Somos lo que nos han hecho, lentamente, al correr tantos años. Cuando estamos definitivamente seguros de ser nosotros, nos morimos. ¡Qué lección de humildad!» (María Teresa León, de quién hoy celebramos su 120 aniversario nos explicó quiénes éramos y cómo podríamos vivir muchos años: no saber quiénes somos) 

Y por estas fechas de hace 50 años triunfaba en el mundo esta canción... Gaudiu de la Castanyada i un consell: posar-vos la disfressa de vida.




 

 

 

 

 

 

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