domingo, 23 de noviembre de 2025

 TATUAJE

El día que cumplí cuarenta decidí hacer algo radical: tatuarme una frase en latín. Nada dice “madurez” como una aguja clavándose en el brazo, pensé.

Quería algo profundo, pero comprensible para quien solo ha leído sentencias en tazas de desayuno. Al final caí en carpe diem. Tópico, sí. Así que lo “mejoré”:
KARPE DIEM, con K.

Más moderno, más calle, más yo.

El tatuador no preguntó. Mis amigos aplaudieron. En la oficina lo enseñaba como si llevara un máster grabado en la piel.

Hasta que un día, en una cafetería, un señor se me quedó mirando el brazo.

—Bonita cita —dijo—. Soy profesor de latín. Solo un detalle: se escribe con “c”, no con “k”.

En ese momento entendí que no estaba viviendo el presente. Lo que había inmortalizado era mi propio ridículo.

«Los cigarrillos no forman parte del comportamiento humano, son un hábito.» (A Joe Eszterhas, nacido el 23 de noviembre de 1944, sólo le falta añadir a la frase –aún está a tiempo- “un hábito malsano”. Seguro que él no fuma, por ello y porque hoy es su onomástica le deseo que cumpla muchos más y que escriba otro guión parecido a ´instinto básico´)

A los  63 años llamarse "Carlitos" aunque sea en brasileiro ya no procede. Así que le llamaremos Carlos y le dejaremos que siga bebiendo caipirinhas.

Ritme de llima i vertigen

Al bar de platja, la Maria gira els gots com si fossin planetes petits.

Ron, sucre, llima, gel picat: alquímia barata per a turistes cansats. Però quan em somriu, el món fa un glop enrere.

La seva rialla porta samba, trons llunyans i nits que no perdonen.

Em serveix una caipirinya i m’assenyala el cartell: “Prohibit enamorar-se de la cambrera”.

Brindem igualment.

El primer glop crema, el segon acarona, el tercer ja no recordo si era beure o besar-la.

Quan tanco els ulls, només sé que vull emborratxar-me de tornar-la a veure.


 

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